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La Guardia Costera descarga decomiso millonario de cocaína incautada en el Pacífico

The Coast Guard unloaded 22,000 pounds of cocaine seized during drug interdiction operations in the Eastern Pacific. The 11 tons were loaded on to trucks at the 10th Avenue terminal in San Diego under heavy security.
The Coast Guard unloaded 22,000 pounds of cocaine seized during drug interdiction operations in the Eastern Pacific. The 11 tons were loaded on to trucks at the 10th Avenue terminal in San Diego under heavy security.
(John Gibbins / San Diego Union-Tribune)
SAN DIEGO UNION-TRIBUNE

El miércoles, la Guardia Costera descargó más de 11 toneladas de cocaína por un valor estimado de 300 millones de dólares que fue incautada en aguas internacionales en el Pacífico oriental en menos de un mes.

Las tripulaciones a bordo de tres barcos de la Guardia Costera —Stratton, Séneca y Active— confiscaron la droga de ocho barcos desde fines de agosto hasta mediados de septiembre, dijeron las autoridades.

Los miembros de la tripulación se reunieron en la cubierta del Stratton el miércoles por la mañana en la Terminal Marítima de 10th Avenue, mientras tarimas repletas de cocaína, envueltas en bolsas de arpillera, eran trasladadas desde la cubierta del barco a camiones que esperaban abajo.

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Una muestra de los narcóticos será probada y retenida como evidencia mientras la fiscalía federal procesa a 29 personas arrestadas en relación con los casos de contrabando.

El resto de la droga será analizada por la Administración de Control de Drogas (DEA) y posteriormente será destruido.

El capitán Craig Wieschhorster, comandante del Stratton, dijo que las incautaciones no solo impiden que las drogas lleguen a las calles de los Estados Unidos, sino que también tienen otros impactos.

“Mientras estas cosas son traficadas, estas organizaciones criminales transnacionales siembran violencia e inestabilidad en la región y afectan a las empresas comerciales legítimas”, dijo. “Todo eso aumenta las presiones migratorias en la frontera sur de Estados Unidos”.

Los botes de contrabando que fueron detenidos incluyeron pangas y botes de baja altura. Todos fueron encontrados a más de 1000 millas de la costa de México, Centro y Sudamérica.

En algunos casos, dijo Wieschhorster, los miembros de la tripulación de la Guardia Costera pudieron sorprender a los que estaban en los barcos después de usar drones para observar a los contrabandistas.

“Nos enfrentamos a estos muchachos, a veces en la oscuridad, y nos subimos a bordo sin que ellos se dieran cuenta y pudimos derribar todo al mismo tiempo: los narcóticos, la gente y los barcos”, dijo.

Otras veces, los contrabandistas divisaron al personal de la Guardia Costera e intentaron deshacerse de sus drogas y evadir a los miembros de la tripulación.

Se encontraron armas en algunos de los barcos, pero nadie las usó contra su tripulación, dijo. El Stratton fue responsable de detener seis barcos, mientras que Active y Séneca detuvieron un barco cada uno.

Eleven tons of cocaine were unloaded from a Coast Guard cutter Wednesday morning at the 10th Avenue Marine Terminal. An armed crew member keeps watch on the ship's deck.
(John Gibbins / San Diego Union-Tribune)

Antes de actuar, los funcionarios estadounidenses se aseguran de que están autorizados para abordar los barcos y confiscar la carga ilícita. Si el barco lleva la bandera de un país, los funcionarios se comunicarán con los contactos de la policía en esos países para determinar cómo proceder, dijo un portavoz de la Guardia Costera.

Wieschhorster dijo que la Guardia Costera trabaja con numerosas agencias asociadas, incluido Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), agencias de inteligencia de EU, fiscalías federales y militares, así como socios internacionales, en su esfuerzo de interdicción de drogas.

“Nuestra estrategia en la frontera sur de Estados Unidos es que la seguridad comience en el mar”, dijo el capitán. “Podemos interceptar más cocaína en su forma más pura en el mar cuando sabemos que los contrabandistas son los más vulnerables”.

CBP utiliza aviones y drones para ayudar a buscar y ubicar barcos de contrabando para que sean interceptados por el personal de la Guardia Costera. Timothy Sutherland, subdirector aéreo y marítimo de San Diego del CBP, dijo que las tripulaciones aéreas realizan misiones de vigilancia de largo alcance y utilizan un radar de área amplia que puede detectar el movimiento en el agua.

“Somos capaces de detectar, podemos monitorear y, en última instancia, podemos interrumpir la actividad de los contrabandistas”, dijo.

Wieschhorster dijo que los equipos de la Guardia Costera están patrullando un área en el Pacífico Oriental que es aproximadamente del tamaño de los Estados Unidos continentales.

“Es una gran región. Es un área enorme”, dijo. “Tener tres barcos allí abajo no es mucho. Es un área grande para cubrir…

“Esto es solo 30 días de trabajo”, dijo, señalando las tarimas cargadas con ladrillos de cocaína envueltos en arpillera. “Así que esto sucede bastante”.

Kucher escribe para el U-T.

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