EE.UU. anima a los partidos norirlandeses a “restaurar” el gobierno regional
- Share via
Washington — El Gobierno del país apoyó hoy la iniciativa de Irlanda y el Reino Unido para reanudar conversaciones entre los principales partido norirlandeses y animó a estos a alcanzar un acuerdo para “restaurar” su gobierno regional.
En un comunicado, la Casa Blanca también reiteró su “firme apoyo al proceso de paz en Irlanda del Norte”.
“EE.UU. apoya la iniciativa de los Gobiernos británico e irlandés de convocar conversaciones políticas en Irlanda del Norte. Alentamos a los líderes políticos de Irlanda del Norte a regresar a la mesa de negociaciones para restaurar el gobierno de la región”, dijo.
Londres y Dublín anunciaron hoy que los partidos norirlandeses iniciarán el próximo 7 de mayo una nueva ronda de conversaciones para restaurar el Ejecutivo de poder compartido, suspendido desde enero de 2017.
Los dos Gobiernos indicaron que la muerte, la pasada semana, de la periodista Lyra McKee a manos del grupo armado Nuevo IRA generó “un rechazo generalizado de la violencia” en la sociedad norirlandesa y constató el deseo de “progresos políticos”.
En su comunicado, la Casa Blanca también se mostró “impactada” y “triste” por la muerte de McKee, abatida por disparos de un encapuchado del Nuevo IRA -escisión del IRA opuesta al proceso de paz-, durante disturbios ocurridos en Derry el pasado 18 de abril.
El ejecutivo de Belfast cayó en enero de 2017 y las elecciones consecuentes confirmaron al protestante y ultraconservador Partido Democrático Unionista (DUP) y al republicano Sinn Féin como las principales organizaciones políticas de la región.
Ambas formaciones mantienen diferencias en asuntos como la lengua gaélica, el matrimonio homosexual y los mecanismos para asistir a las víctimas e investigar los crímenes cometidos por los paramilitares y las fuerzas de seguridad durante el conflicto.
Los dos partidos también mantienen posiciones opuestas respecto a la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), defendida por el DUP -socio de Gobierno de Theresa May en Londres- y rechazada por el Sinn Féin -antiguo brazo político del IRA.
